La verdadera historia del hijo de María Antonieta y Luis XVI
No se si muchos saben que la firma de baño que diseñé bajo el nombre de CROISSIER, es un tributo a mi madre, Manuela Estupiñan Croissier.
En su familia, siempre le dijeron que descendían del delfín de Francia, el menor de los tres hijos de María Antonieta y Luis XVI. Luis Carlos de Bourbon, según cuenta la historia, fue sacado de la cárcel de Temple en un cesto con ropa sucia y reemplazado por otro niño, y había sido traído a Gran Canaria con un preceptor.
Mi madre tras jubilarse, pasó años recabando información en los archivos parroquiales de la isla, reconstruyendo su árbol genealógico. Hasta dar con El niño ocultaba su apellido, y firma unas veces como Juan de la Cruz, otras Juan Croivert o Juan Francés, es en 1820 cuando aparece el apellido Croissier.
Retrato Luis Carlos de Bourbon
Todos los Croissier descienden de este niño que vivió en Telde y contrajo matrimonio primeramente en Agüimes, pero su esposa falleció sin descendencia. Posteriormente conoció a la que sería la madre de sus cinco hijos, llamada María de los Remedios Expósito, natural de la isla de Tenerife con quien se casó en la Catedral de Las Palmas de Gran Canaria, en 1815 al igual que el preceptor.
Para contraer matrimonio no pudo presentar su partida de nacimiento, ocultando siempre su verdadero origen. Siempre estuvo acompañado del preceptor Pablo Sneyder y no se encuentra partida de defunción en esta isla, por lo que se supone que regresó a Francia ya mayor, donde se supone que está enterrado.
Una prueba de ADN realizada por el Instituto de Medicina Legal de Las Palmas, ha confirmado que el perfil genético de esta familia coincide con el de los Bourbon de Francia.
Así lo afirma José Pestano, Director del Laboratorio de Genética del Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, con quien contactó mi madre, este realizó el estudio en el año 2017 del cromosoma Y (este cromosoma se transmite inmutable de padres a hijos varones) a Eduardo Croissier de la Nuez (el núcleo del ADN solo se transmite padre a hijo varón) tras compararlo con el perfil genético de los Bourbon, publicado por el lnstituto para los análisis de origen genético suizo Igenea, concluyó que la cantidad de parámetros que contenía el haplotipo de ambos estudios genéticos probaba que Eduardo Croissier pertenece a la familia Bourbon.
Mi madre está convencida de que el corazón que se exhibe en la Iglesia de San Denis, donde están los restos de la familia real, y que se analizó para confirmar que el niño había muerto en Temple, no es el de Luis Carlos, sino el de su hermano Luis José.
Recuerdo que cuando visité el Palacio de Versalles por primera vez, lo que más me llamó la atención fue el crucero de la capilla royal, que destaca en lo más alto. La familia real era muy católica, de hecho por mucho tiempo se consideraban representantes de Dios en la tierra.
Para cualquier consulta o ampliar esta info puedes contactarme en:
gabrielcroissier@gmail.com
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